“Nuestras fuerzas están tratando de completar su misión”, declaró Benjamin Netanyahu en el segundo día de la operación militar contra las Brigadas de Yenín en el campo de refugiados de esta ciudad en el norte de Cisjordania. Al menos 11 palestinos han muerto, tres de ellos menores, decenas han resultado heridos, 120 detenidos y más de 3.000 han sostenido que dejaron sus casas a causa de los combates. Ministro de Defensa, yoav galanteproclamó victoria y afirmó que Yenín «en los últimos dos años se convirtió en una fábrica de terror y esto se terminó en los últimos dos días», pero los sobresaltos intensificaron el atardecer.
La respuesta palestina llegó en forma de múltiples intentos de atropello en Tel Aviv en lo que eres peatones resultaron heridosvari de ellos de gravedad, y el conductor del vehículo abatido.
La gran operación lanzada en el oeste de Jordania por el Estado judío en las últimas dos décadas recibió la sentencia de países aliados de Israel como Egipto y Jordania. Desde Naciones Unidas se mostró “alarmada por la magnitud de los operativos aéreos y terrestres que se estaban llevando al cabo en un campo de refugiados densamente poblado”, en palabras de Vanessa Huguenin, vocera de la oficina humanitaria del organismo internacional. Entre 14.000 y 20.000 personas vivían en este campamento levantado en 1950.
Fuentes palestinas consultadas en Yenín aseguran que el 90 por ciento de los combatientes lograron escapar por un túnel y que el enemigo no pudo penetrar en gran parte del campamento. Yihad Islámica es la facción palestina más importante, aunque hace meses las fecine pelean unidas bajo el paraguas de las recién creadas Brigadas de Yenín, donde también siguió a Hamás.
Negación de atención médica.
Los choques extendieron el campo a la ciudad y los israelíes realizaron una redada en el hospital Ibn Sina en la búsqueda de milicianos heridos y les lanzaron gases lacrimógenos. El trabajo de los trabajadores de la salud palestinos, como el de los periodistas, no es seguro en este tipo de operaciones.
El Ejército israelí lanza una operación a gran escala en Jenin, en Cisjordania
Desde la Organización Mundial de la Salud (OMS) denunciaron que, debido a las restricciones impuestas por el ejército, “si ha impedido que los equipos de rescate ingresen al campamento incluido para sujetar a las personas resultando con heridas graves”, declaró su vocero. cristian lindmeier. La ONG Médicos Sin Fronteras (MSF) ha condenado la denegación del acceso médico y ha informado de que sus equipos esperaban a las puertas del campamento de pacientes con herencia bala.
Las voces críticas con Netanyahu consideran esta operación como una concesión al sector más radical del Gobierno, encomendada al Ministro de Seguridad Nacional Itamar Ben Gvir, que pegó un gran golpe en Yenín durante dos semanas. Las identidades de los palestinos muertos revelan que, por el momento, Israel no ha dado seguimiento a los máximos dirigentes de las Brigadas de Yenín, quienes suponen que la diversión se verá lastrada hasta las últimas 48 horas por ataques aéreos, incursiones terrestres, destrucción de las principales rutas de los campamentos y comprensión de las municiones y los explosivos.
Atropelo múltiple
Las noticias sobre Yenín quedaron eclipsadas en los medios locales de Tel Aviv atropello. Mientras Hamás aplaudía el llamado a la “acción heroica” y decía que “la ocupación pagaría el precio de sus crímenes”, el ministro Ben Gvir partió del lugar del ataque para defender una vez más la necesidad de facilitar el acceso a las armas a los civiles. .
El conductor del vehículo divisó a un grupo de viandantes en un andador de la ciudad costera, luego de haber intentado apuñalar a los heridos, pero fue abatido por los disparos de un viandante armado. «Felicito al valiente ciudadano que neutralizó al terrorista y salvó vidas humanas», declaró el político ultranacionalista. Cada vez que Israel ha lanzado una operación sobre Yenín las consecuencias son severas y ha elevado el grado de amenaza ante la posibilidad de nuevas acciones de los lóbulos solitarios palestinos.