Sucesión de fallos emblemáticos contra los represores de la dictadura de Pinochet

La sala penal del Tribunal Supremo de Chile ha dictado en los últimos tres meses una decena de fallos emblemáticos, justo en vísperas de que se conmemoren los 50 años del golpe de Estado.

A juicio del abogado Nelson Caucoto, querellante desde la instauración del régimen militar de cientos en casos de violaciones a los derechos, la diligencia de la sala penal está en que «los 50 años son una marca y sería incomprensible que llegáramos a ella sin que hayan fallado causas determinantes».

A esto se suma el hecho de que, en noviembre, dos de los cuatro ministros titulares, Jorge Dahm y Haroldo Brito, cumplen 75 años, edad a la que por ley deben jubilarse.

Derechos humanos

El papel del Supremo, duramente cuestionado en la dictadura porque de los 5.400 recursos de amparo presentados solamente acogieron diez, se ha encausado en los últimos veinte años a juicio del mundo de los derechos humanos, especialmente después de la detención de Augusto Pinochet en Londres.

Desde el retorno a la democracia, asegura Caucoto, unas 500 causas han sido falladas, y, de las más de 1.500 que están pendientes, dos tercios están en etapa de sumario, porque no hay información que permita seguir una línea de investigación.

En los últimos fallos, el Supremo ha condenado a más de 60 exagentes de los servicios de Inteligencia y Fuerzas Armadas del régimen, y la mitad de ellos se encontraban en libertad, asegura a ABC el abogado.

A los siete exmilitares condenados por el asesinato de Víctor Jara en 1973 (uno se suicidó y dos están prófugos) se les impuso 25 años de cárcel por los delitos de secuestro y homicidio calificado, siendo estos los que han recibido mayor pena.

En los otros casos, las condenas van entre los 10 y 15 años, como es el caso de Carmelo Soria, asesinado en 1976. En otros, como la desaparición de 10 miembros del GAP (Grupo de Amigos Personales del presidente), detenidos el 11 de septiembre junto al hijo de la secretaria personal de Allende, la Suprema absolvió a un exuniformado y dictó sobreseimiento en otro por ya haber fallecido. Aquí no hay aún otros inculpados.

Se esperan las sentencias finales por la desaparición de 23 asesores del expresidente Allende, detenidos en La Moneda el día del golpe

Otro fallo simbólico es el conocido como ‘Venda sexy’, un cuartel de tortura usado entre 1974 y 1975 por donde pasó casi un centenar de personas que sufrieron las más brutales vejaciones y violaciones. En esta causa por el secuestro y tortura de diez personas, la sala penal condenó a 15 años a tres exagentes de la Dirección Nacional de Inteligencia (DINA). Y otro tanto ocurrió con 30 exagentes en la causa ‘operación Colombo’, que registra 119 víctimas.

Futuras sentencias

En los próximos días se debería conocer el fallo del ‘caso Fuenteovejuna’ donde cinco exmiembros del Movimiento de Izquierda Revolucionario (MIR) fueron acribillados, en 1983, por 20 exagentes de la Central Nacional de Inteligencia (CNI).

También se esperan las sentencias finales por la desaparición de 23 asesores del expresidente Allende, detenidos en La Moneda el día del golpe; y la denominada ‘operación Cóndor’ donde 22 exagentes están condenados por la desaparición de 12 personas en Chile, Paraguay, Uruguay, Argentina y Brasil.

Otro fallo simbólico es el conocido como ‘Venda sexy’, un cuartel de tortura usado entre 1974 y 1975

Además, en estos días se alegará en la Suprema el ‘caso Quemados’, de 1986, donde murió el fotógrafo Rodrigo Rojas de Negri y sobrevivió con graves quemaduras Carmen Gloria Quintana y por el que están condenados 10 exmilitares a entre 20 y 10 años de prisión.

Se suman el ‘caso Aculeo’ sobre la desaparición de once campesinos de Paine, al sur de la capital, y varios otros que datan de los primeros años de la dictadura como el asesinato de la cúpula del MIR en Concepción.

Todas las sentencias de la segunda sala consideran, además, millonarias indemnizaciones que el Estado debe pagar a los familiares de las víctimas.